domingo, 30 de noviembre de 2025

La claridad de una esperanza

A lo lejos,
cuando el sol se desvanecía,
vi encenderse, tenue,
la claridad de una esperanza:

un respiro profundo
que abrió mi alma,
aire suave
que acarició mi mejilla
y dejó en mi piel
la frescura temprana
de un amanecer nuevo.

Fui sembrando semillas,
extendiendo mi jardín,
allí donde renace el día
y los pájaros despiertan,
donde mi cielo permanece vivo
y tú caminas cerca,
en el borde de mi acera.


lunes, 24 de noviembre de 2025

La amistad que sostiene

La amistad que sostiene

La raíz fue una mirada,
de esas que dejan complicidad.
Encontré en ti un abrazo sincero
cuando cruzaba el valle espinado.

Hallé la lealtad,
el refugio tibio de tu corazón.
Eras cálida como el sol tenue
que se cuela suave por la ventana.

Entendí que nuestro vínculo
traspasa siempre toda frontera.
Me enseñaste a creer
en las manos que sostienen,
en huellas que no duelen,
en los días que iluminan.

Cuando la noche pesaba
y mis días lentamente se apagaban,
tomé prestadas tus risas,
seguro de que la vida
no traería otra amistad
tan pura y tan leal:
un regalo sin igual.

domingo, 23 de noviembre de 2025

Huella invisible

Dejaste rastros,
dejaste secuelas.

Creí que me herirías la piel,
que me arrancarías el corazón
con esa pequeña mano tuya.

Pero fue el alma lo que tocaste:
una herida silenciosa,
invisible… y, sin embargo, tan nítida.
De esas que duelen hondo,
porque se vuelven tormenta adentro.

No late, no se muestra.
Parece nada…
pero pesa como todo.

Un resonar profundo,
una mirada inquieta,
un resplandor amargo,
un abrazo que nunca llega.

sábado, 22 de noviembre de 2025

Testigos de bruma

 Cuando el día despertó,

vi la bruma extendida sobre los tejados de las casas.

El aire era tenue,
y el silencio envolvía por completo mi horizonte.
El alba se asomaba en tus ojos,
ojos que dejaban el rastro
de aquello que aún nos habitaba.

Mi aliento temblaba,
sintiendo el calor que transpiraba tu piel.
Nos uníamos con una sola mirada;
entonces el vértigo llegó
y se posó frente al precipicio.

Los testigos eran la bruma
y las montañas frías.
Y tu mirada,
tu mirada que iluminaba mis días
y que, sin aviso,
oscureció el alba.

miércoles, 12 de noviembre de 2025

Promesa en el viento

El tacto de tus labios con los míos,
como una caricia desnuda al alma.

Recuerdo la lágrima que derramaste aquel día,
cuando el viento soplaba fuerte
y las palomas se reunían.

Fue como ese último beso,
un adiós seco,
un deseo amargo que aún yace en mi recuerdo.

El suspiro del cuerpo
al sentir la dulzura
de un corazón sincero.

Aquella promesa que se quedó en el viento,
cuando el cuerpo temblaba entre nuestros cuerpos,
cuando bastaba mirarte
para entender el universo.


Luz de sombra

Miro el horizonte azul,
y veo una estrella sobre el mar.
Es el jardín del mundo.

Allí reposa la sombra
de lo que un día fue la luna,
y de lo que un día fue nuestro amor.

¡Cae tu recuerdo de hielo!

Como un vuelo hacia el universo,
como una mariposa
que sueña con llegar al cielo.

lunes, 10 de noviembre de 2025

El eco de la montaña

En la montaña lejana
se dibuja un amanecer sombrío.

El susurro de la lluvia
cae sobre el tronco.

Aquellos montes guardan
el recuerdo de un verde profundo.

La brisa trae consigo el rocío
de los que ya no están presentes.

La raíz quedará impregnada en la piel
de los que fueron
y ya no serán.

La fruta no será,
sino el néctar de un nuevo comienzo.

domingo, 2 de noviembre de 2025

El relinche de una cortina

Arrasa ciudades,
arrasa personas bajas y flacas.
Es frío como la lluvia
y cálido como tu amor.

Es compulsivo, inestable,
en ocasiones calmo como el pasto.
Está en las partículas diminutas del mundo
y, a la vez, no está en ningún lugar.

Es la nada,
o un salto en el vacío.
La mirada perpleja y estática del bullicio,
el caer del agua en la taza,
el relinche de una cortina,
el movimiento tectónico de nuestros cuerpos:
tan unidos y tan lejos,
tan lejos como la noche y el día,
como tu mirada cálida y la mía,
estática, pensativa, dudosa, quieta,
dormida.

¡La nada!...
La nada.


sábado, 1 de noviembre de 2025

Entre el sonido y la nada

Y un leve suspiro,
inunda en silencio,
dejando eco.

viernes, 31 de octubre de 2025

Canela

Olor a canela brota de tus ojos;
mi mano descansa en tu larga cabellera.
Sabía que el oscuro manto te cegaba,
y que mi risa —ya gastada— era de un hombre moribundo.
Como la sal que anhela ser azúcar,
mi alma busca una ventana en la fría soledad.


sábado, 5 de julio de 2025

El dia frio de una noche de invierno

 El dia frio de una noche triste. 

Cuando las casas se estrellaron y tu mirada en mi sucumbio.

He revisado las noches, 

Las tardes que han suscitado la muerte.

He caido bajo el horizonte de una mañana fria y sin lamento. 

Cuando las aves caian y los cielos nevaban. 

Fria la tarde que una vez fue la muerte del horizonte.